Ese día estaba para asesinar a Felipes. Pero decidimos fotografiarlo y el panky nos abrió el camino.
Cuando llegamos todo estaba cerca. La batería, el bajo, el micrófono. Las notas estaban ahí. Justo al Frente mío. Me acompañaba una canon 80d. Y la Rucia, que es fanática de CAF, pero cuática. También fuimos a verlos a Woodstaco, la wea buena. Un tripazo de concierto.
En la Bodeguita de Nicanor fue algo mágico, parecía que todo estaba en silencio. Cuando salió la banda al escenario. Podías tocarlos con la respiración. Yo Disparé pocas veces. No quería asesinarlos. Escuche todo el concierto detrás del visor. Podías tener a los músicos adentro de tus oídos.
El público al comienzo estaba tímido. Pero la música los dejó extrovertidos. Yo guardé cada nota en una fotografía. Mientras disfrutaba y sin darme cuenta, Felipe Metraca tiró las baquetas. El público pidió otra. Sonó otra canción. Felipe tiró otras baquetas. Yo Guardé la cámara y solo nos quedamos con la luz, figura y sombra de las frías calles de Concepción.
Equipx Registro: Claudio Casas / Cindy Stumpfoll